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El blog de Moncadista

Nací un 26 de julio…

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15M

Casta científica

Llevo más de medio año seco, sin nada original que decir, disfrutando de lo que otros dicen pero sobre todo empeñado en la experimentación animal con ratones para intentar, humildemente, acercarnos a encontrar una cura o prevención para el cáncer de próstata metastático. Llevo algo más de tres años trabajando con ratones, y en el nuevo instituto he encontrado unas condiciones en el estabulario sencillamente impresionantes. Estoy muy sorprendido por la profesionalidad y sobre todo la inmensa ética con la que el personal tanto investigador como técnico trata a los animales.

Además de científico soy comunista. Profundamente convencido de que no habrá revolución sin ética revolucionaria. Así mismo creo que no alcanzaremos una humanidad más justa sin un respeto al resto de seres vivos que nos acompañan, o dicho al revés, el maltrato animal es consecuencia de la profunda inhumanidad a la que nos lleva el sistema de explotación capitalista.

Lo que me ha hecho volver a escribir es este artículo.

Este es un debate que hace tiempo que quiero seguir desarrollando. ¿Qué ciencia del s. XXI queremos? Y más concretamente qué biomedicina queremos porque es cierto que el rumbo de la investigación biomédica depende de la presión del capital. No me dejo de sentir prostituido cada día por las multinacionales farmacéuticas.

Antes de seguir quiero apuntar que me ilusioné como el que más con los 5 diputados de Podemos. Pablo Iglesias y La Tuerka hicieron mi “exilio” gringo mucho más agradable.

Otro apunte. Respeto mucho a los militantes, sobre todo en EEUU, que se juegan la cárcel, y a veces la vida, denunciando el maltrato animal en granjas industriales.

Empecemos con el artículo de Ruth Toledano.

No voy a entrar en lo del carácter revolucionario del 15M, de lo que algo he escrito. Me centraré en la parte “científica,” donde se nos acusa a los científicos de casta.

Ruth escribe: “El cientificismo, que considera que los únicos conocimientos válidos son aquellos que se obtienen mediante las ciencias experimentales y reduce, por tanto, el saber humano al conocimiento científico, se inscribe, podríamos decir, en lo más viejo de ese régimen”.

Según mi amigo David, químico en Cambridge: «Esta frase la escribe alguien que siento decir no sabe de lo que habla. Cientificismo es cuando la ciencia sustituye a la religión y se adopta como dogma. Es un defecto en el que se puede caer (y de hecho ocurre) pero ante lo que hay que defenderse con más (aun) pensamiento crítico».

Y es cierto, lo siento Ruth, pero no tienes ni idea de lo que hablas. En este otro artículo tuyo afirmas que la experimentación animal puede ser sustituida por chips o in vitro. En biomedicina eso es imposible. Además, en nuestros centros no nos dejan utilizar tantos animales como queramos, ni hacer lo que nos de la gana. Todo tiene que tener una justificación. ¡Y es que es absurdo porque todo lo hacemos antes in vitro!

El verdadero debate aquí es qué tipo de medicina queremos. Lo de “medicina alternativa” no dice nada. ¿Alternativa a qué? Lo que queremos es que cure. Y para demostrar que cura hay que utilizar el método científico, que no es más que intentar demostrar que algo no es falso.

Y aquí es donde entra la ética. La cuestión de si uso de animales sí o no es, de verdad, irrelevante. Lo que nos jugamos aquí es más que eso. ¿realmente queremos curar el cáncer o el alzheimer? ¿Tenemos en cuenta las horribles consecuencias que puede tener sobre la humanidad y el planeta la erradicación del cáncer y las enfermedades infecciosas? Estás atacando a los que utilizamos animales en experimentación biomédica con el sistema productivo de carne que tenemos, ¿de verdad?

Venga, ¿cuando nuestro padre tiene metástasis de cáncer de próstata y le dan un par de meses de agonía, no queremos que se cure, o que no hubiera pasado? Bueno, pues eso hoy día es imposible sin experimentación en organismos complejos, y ya no te digo en biochips. No se puede entender el mecanismo de acción de un fármaco en un cultivo celular, no tienes ni idea Ruth. No sabes lo que es un cultivo celular. Y decir que no se puede extrapolar a los humanos… pura demagogia. ¿qué nos vas a contar? Jamás diríamos que un tratamiento que funciona en ratones lo hará en humanos. El resto de la comunidad científica se mofaría de nosotros. No, es sólo un paso más, el siguiente es probarlo en humanos.

Con la experimentación en ratones que hacemos ahora mismo en mi laboratorio quizás podremos, en unos años si la financiación lo permite, sensibilizar a los tumores de próstata a la quimioterapia con una simple dieta. La cuestión ética más importante no es si utilizo animales, si no si realmente debemos encontrar una cura del cáncer.

¿estoy aquí aplicando “la tiranía de la especialización” como tú dices? Pues puede que sí. ¿Pero es que vosotros no lo hacéis? ¿Quién ha elaborado buena parte del programa electoral de Podemos? Profesores universitarios según Pablo Iglesias ¿No aplica continuamente Pablo Iglesias una tiranía intelectual del que se sabe “creído,” al afirmar tajantemente en esta entrevista que el keynesianismo producirá empleo, cuando numerosos economistas (como Pedro Montes si no me equivoco), o decrecionistas, afirman que la inversión y el crecimiento puede suceder con destrucción de empleo? ¿No es contradictorio más productivismo y decrecionismo al mismo tiempo?

Los científicos seremos casta tirana, pero tú en este artículo pasas sin escrúpulos de decir que utilizamos animales para seguir obteniendo fondos a la siguiente línea hablar del uso de animales en cosmética. Y lo de igualar los desahucios al uso de animales en experimentación en el último artículo es todo un ejemplo de ética: política y periodística.

Totalmente relacionado con esto está la creación del círculo “Podemos terapias naturales.”

Es un reflejo de una de las principales carencias de Podemos, su falta de cohesión ideológica. Han empezado la casa por el tejado, y si bien están convulsionando la escena política del país, está sirviendo como coladero para todo tipo de disparates oportunistas, de lo peor del quincemayismo hippie, alejado de las problemáticas reales, cotidianas de las masas populares de nuestros países.

Si este arribismo oportunista no se ataja de alguna manera (con democracia, militancia, organización…), el proyecto está destinado a fracasar. No podemos empezar un movimiento amplio insultando a toda una profesión, con unos niveles de precariedad laboral y personal altísimos. Un sector, el investigador, que fue el primero en organizarse con las nuevas tecnologías, de forma horizontal a través de la Federación de Jóvenes investigadores-Precarios. Apuesto a que muchos de los que han participado o participan en la FJI son parte activa en la formación y apoyo a Podemos, por el talante abierto, solidario, anti-dogmas… de la casta científica.

Ruth, espero que te disculpes antes la comunidad científica de este país, y si no, a ver si eres capaz de decirle a la cara a Iván Calvo (premio Investigador Novel en Física Teórica) que también es casta.

Jugando a cambiar el mundo

Sus caras son el reflejo del alma

He descubierto que escribí esto el 27 de septiembre, está sin terminar, y parece casi anticuado, pero creo que vale la pena hacerlo público.

Tuve un jefe que me mandaba experimentos dependiendo de lo que hubiera disponible. Si tenía tal anticuerpo, tal máquina, o tal línea celular, pues probaba a ver lo que salía. Al poco tiempo me di cuenta de que eso no era ciencia, eso era jugar a hacer ciencia. Un par de años antes había empezado a jugar a hacer política. Mis compañeros y yo “experimentábamos” con lo que teníamos a mano. Movimiento estudiantil, panfleteo, performances, e incluso alguna movilización “grande” como la del Bricall o la anti-LOU. Siempre a remolque del calendario gubernamental. Con el tiempo me di cuenta que eso no era hacer política, eso era jugar a hacer la revolución.
Ahora en ciencia tengo unos objetivos, busco los recursos y hago los experimentos que me responden lo que originalmente me había preguntado. Sin embargo, muchas veces no entiendo la respuesta, o no tiene sentido, o tengo que repetirlo un millón de veces hasta que la técnica está puesta a punto. No es fácil.

Cuando se convocó el 25S muchísima gente estuvo de acuerdo en que era una barbaridad, que era suicida. Además, estaba convocada por un grupo anónimo y los principios, los objetivos eran vagos, hasta Inestrillas de la Falange los apoyó. Sin embargo, la convocatoria se abrió y otros “grupos” entraron en la misma, y las reivindicaciones se concretaron. De ocupar se pasó a rodear, y la palabra constituyente empezó a sonar.
Durante las últimas semanas, las acciones del SAT habían llevado el debate tanto en los mass media como en las redes a donde personalmente creo está el meollo: la cuestión de clase, la pobreza y la explotación. La convocatoria del 25S es como cuando me dijeron que en mi laboratorio había una máquina que medía el consumo de oxígeno y la producción de lactato en tiempo real, y con todos los extras, una pasada. ¡Tenía que usarlo! Y me preguntaron, ¿para qué? No sé, pero mola, hay que usarlo. Las consecuencias fueron que perdí un poco el tiempo, aunque también me familiaricé con el aparato mientras elaboraba las preguntas que quería responder. El 25S no tenía preguntas, ni objetivos. ¿Para qué? Pues… porque… ¡no nos representan! La diferencia con mis experimentos es que sí hubo consecuencias, y graves. No sólo los heridos, algunos de ellos muy graves. Sobre todo yo veo dos:

1- el debate vuelve de nuevo al terreno de juego del sistema, la violencia. Y ahí, amigos borrokillas, nos la meten doblá. El debate es estéril. La policía es mala malosa, nos pegan y encima sin identificar. Y eso que el 19J parecía que estaban con nosotros. Y encima con infiltrados to cutres con banderas rojas y protecciones a lo tutti bianchi. Yo me he echado unas risas cuando pegaron a alguno de los secretas encapuchados.
Si bien la cosa ha cambiado desde hace un año cuando escribía esto. Me ha sorprendido la reacción de la gente, su valentía. Pero al final ¿eso qué significa? Pues historietas para los nietos, aunque algunos casi no lo cuentan o no podrán tener nietos. ¿Alguien me puede explicar dónde está el beneficio? ¿cuál de los objetivos se ha cumplido? Si es que había objetivos realistas. Como dice mi amigo Luís: “Como era de esperar, la represión ha capitalizado el discurso público. De reivindicaciones o programa, ni una palabra, señal nuevamente de que la acción política no depende ni de las intenciones de los convocantes ni del marco en última instancia, sino de las propiedades de la acción misma: si esta interviene en lo real o no lo hace; si produce algo. ¿Qué produce el 25S?” (al final volveré sobre esto).

2- No nos representan. ¿Eso implica que el movimiento sí representa a la mayoría? Rajoy, puro en mano, ha dicho algo muy sensato: “ha rendido homenaje a la «inmensa mayoría» de españoles que no se manifiesta contra las decisiones del Ejecutivo”. Y es cierto, ¿qué pasa con esa inmensa mayoría? Evidentemente Rajoy no los representa, pero ellos no se sienten representados por “el movimiento”, ¿por qué?. Y lo que quiero resaltar aquí, esta convocatoria ¿los acerca, los aleja del movimiento o los deja como estaban: buscándose las habichuelas?

Algunos dicen que la crónica de una violencia anunciada es la de sistema en crisis política, crisis de poder. El poder no se ha inmutado, al contrario, se ha deleitado con las imágenes. Ha pasado precisamente lo que tenía que pasar. El asalto al cuartel de invierno no será televisado.
El poder no está en la policía, ni siquiera en el parlamento. El poder alternativo hay que construirlo, y en el proceso es importantísimo que aprendamos a hacer las cosas con objetivos. El empoderamiento de la clases populares también está en decidir cuándo y cómo movilizarse, y no dejarse llevar por la inercia del empujón de una minoría (como es el caso).

Seres sin rostro: La burbuja inmobiliaria y el derecho a la vivienda

Esta semana hablo de los desahucios, la burbuja inmobiliaria, la resistencia. Me baso en el artículo de Jose Juán Martínez en laberinto. A partir del minuto 30, con canción de El Cabrero.

[audio http://seressinrostro.files.wordpress.com/2012/01/11-enero-programa-1-del-2012.mp3]

Regulación o barbarie

Primero veamos el vídeo, de la intervención de Cristina Kirchner, presidenta de Argentina, durante el G20.

[youtube http://youtu.be/mghnG6vfxTI]

«si el capitalismo es eso, que la gente consuma, que ustedes, los empresarios produzcan y vendan cada vez más»

«quién me habría visto en mis épocas universitarias y ahora, estoy proponiendo volver al capitalismo en serio…» «se van a empezar a cuestionar los fundamentos de la democracia…» «Mirar con perspectiva de liderazgo histórico».

Su intervención coincide plenamente con la «Declaración de ocupación» de Occupy Wall st, y con buena parte de las reivindicaciones del 15M. ¡Hay que regular señores! La diferencia con los movimientos es que ella lo dice claramente, hay que regular, para volver al capitalismo productivo (lo que ella llama capitalismo de verdad) frente al «anarcocapitalismo» (término que me encanta). Los movimientos dicen hay que regular porque los ladrones (especuladores) nos están quitando el trabajo, la vivienda, etc. Y ellos no son los verdaderos capitalistas. Son los «verdaderos empresarios», los que tienen que tomar las riendas de esos aficionados que desde su «escritorio con un computador», lo ponen todo patas arriba, por la codicia. (Término muy utilizado en los movimientos).

Ella conoce muy bien, por sus «épocas universitarias» imagino, que es importante que la burguesía mantenga «el liderazgo histórico», la hegemonía. Que su ideología sea la predominante, que no se cuestionen los fundamentos de la democracia parlamentaria. Y estas crisis, que como bien dice, no es otra cosa que el enriquecimiento de unos pocos capitalistas no productivos, llevan a que se pierda el liderazgo.

Cuando el otro día escribía sobre que Occupy Wall st. no son el 99%, estaba diciendo precisamente eso. La regulación del capital financiero, la apuesta por la democracia (la representativa), porque los especuladores salgan de la casa blanca, en contra de la especulación, etc, etc, para recuperar «el empleo» (véase la producción) es el plan de la burguesía (y la ahora aliada pequeñoburguesía), que lo que quiere es que la cosa no se vaya de las manos. Por eso es reaccionaria. Si nosotros (en oposición a la clase en el poder) miramos con perspectiva histórica, veremos que los grandes movimientos de masas que claudicaron ante esas Ideas «foráneas» consolidaron al capitalismo, al de verdad.

Y vuelvo al tema del poder, del liderazgo, de la hegemonía, como queramos llamarlo. Lo que las plazas tienen que construir es un nuevo poder, una nueva hegemonía. Mirándole al capitalismo a los ojos. Viendo a las Cristinas en las plazas, que sus palabras son las del Capitalismo. Que el capitalismo de verdad surge, se alimenta del trabajo, porque donde hay trabajo hay explotación. (el desempleo también es explotación, pero ese es otro tema). Y es ahí donde hay que atacar, en la producción (o no-producción del desempleo).

Argentina salvó con el Kirchnerismo al capitalismo argentino, y diría que regional. Expulsó a los tramposos para que el juego siguiera. Eso es lo que las plazas están haciendo, pidiendo que se saque a los tramposos. Yo estoy en contra. No quiero que el juego continúe, quiero romper el tablero del Monopoly.

No son el 99%. Moncadista ocupa Asheville

El movimiento «Occupy Wall st», con el lema «We are the 99%» se extiende por todo Estados Unidos, cientos de ciudades tienen pequeños campamentos donde se llevan a cabo asambleas, talleres y concentraciones reivindicando al gobierno que gobierne para el pueblo y no para las «corporaciones, las grandes empresas.

Los que ocupan las plazas públicas dicen que son el 99%, refiriéndose obviamente a que el 1% son los dueños de esas corporaciones, a los que piden que salgan de la Casa Blanca. Sin embargo, visitando ya 3 plazas, Nueva York, Durham y Asheville puedo decir que ni son el 99%, ni lo representan. Es importante apreciar en su justa medida lo que en nuestro tiempo, después de años de aparente apatía social, y «fin de la Historia», supone un movimiento como este. Es emocionante. Pero no hace falta ser un genio para darse cuenta de que los que conforman el «movimiento» son estudiantes (o lo fueron), intelectuales, líderes de movimientos sociales marginales, antiguos hippies, pacifistas, etc, etc. Lo son, y los representan. Su obsesión por la no violencia, por la democracia, en contra de las grandes corporaciones financieras, el medio ambiente, etc, no representa las inquietudes «naturales» de la clase obrera. Profundicemos en esto yendo a un panfleto que me dieron en Asheville, la «Declaración de la ocupación», que podéis conseguir en su página web:

Atención, sólo para los "fraudulentos", el resto molan.

De los 22 puntos de la declaración, sólo dos se refiere al «trabajo». Una dice: «Ellos constantemente externalizan la producción, y usan esa externalización para reducir el salario y el seguro médico», y la otra: «Ellos continuamente han hecho todo lo posible para quitar a los trabajadores (los llaman employees no workers) el derecho a negociar un mejor salario y mejores condiciones laborales». Ya está, eso es lo que dicen del 99% de la población los que se autodenominan el 99%. El resto de los puntos van sobre cómo las corporaciones dañan el medio ambiente, se enriquecen con las cárceles o el «colonialismo» (sic), pero sobre todo el que los contribuyentes están pagando los salarios «exorbitantes» de los ejecutivos de Wall st. Y ahí está el quid de la cuestión, aquí y en España. El problema no es la explotación que conlleva miseria, el problema es que, oiga, están abusando.

Buena parte de la energía del movimiento proviene de los miles de jóvenes hipotecados de por vida por los préstamos que pidieron para estudiar una carrera y que ahora son incapaces de pagar, porque no encuentra trabajo. Deudas de 100-150 mil dólares son «normales» en este país. Pero cuidado, los hijos de los «empleados» ni siquiera tienen acceso a esos préstamos. Son los hijos de la clase media de los 60-70 los que en general han tenido acceso a la universidad. Madres que han perdido el trabajo y con ello el seguro médico del pediatra. Pero es que buena parte de la clase obrera no tiene seguro médico. 50 millones sin contar a los «inmigrantes indocumentados».

Me llama la atención también en su insistencia en el pacifismo. En los lemas, las conversaciones, por doquier una y otra vez la «no violencia». Lo que la convierte no en una estrategia del movimiento sino en un fin en sí mismo. Y discúlpenme, pero la clase obrera, con la violencia salvaje que sufre, no tiene como objetivo la no violencia sino el fin de ser objetivo de la violencia, y no es lo mismo. Además, el fin se conseguirá de cualquier modo. Es claro que especialmente en Asheville, con una historia de «hipismo» significativa, este pacifismo se ve reforzado. Eso, y la falta de higiene. Es interesante la historia de Asheville, de la que a lo mejor escribo otro día, pero destacar que siempre ha sido una ciudad liberal y «artística» en un Estado conservador como Carolina del Norte. Un senador de este Estado dijo que habría que rodear de vallas la ciudad y dejarlos morir de hambre; o encerrarlos a todos y echarlos del Estado. Entre otras muchas lindezas.

Resumiendo, podrán mover cielo y tierra, twittear hasta el infinito y más allá, que no movilizarán a la clase obrera estadounidense, que es la que ha sufrido en los «buenos y malos tiempos» sin que la pequeñoburguesía, intelectuales, clase media y demás «entredostierras» se preocuparan por los banqueros malos malosos.

Porque no los representan, porque no son el 99%.

Moncadista ocupa Wall St.

Por casualidades de la vida las dos veces que he visitado Nueva York han sido fechas que han hecho historia. La primera vez el Huracán Irene y la segunda el 15-O.

Como no podía ser de otra manera, Moncadista se fue para la plaza Zuccotti, o también llamada Liberty Plaza. La plaza es muy pequeña, es como la cuarta parte de lo que era Sol, así como el número de personas que allí había. A tan sólo una calle del World Trade center, la plaza se ha convertido en un objetivo turístico más. Puestos de souvenirs y de perritos calientes conviven perfectamente con los puestos de organizaciones marxistas entre sacos de dormir, mochilas y mesas con ordenadores. Gente de traje, disfrazada, de uniforme militar o una peluquería en el centro de la plaza me dejan con la boca abierta. Decenas de personas variopintas posan para los autobuses de turistas que pasan continuamente por la plaza.Una consigna en la caja de una pizza, una televisión de plasma o el streaming en directo no son las únicas herramientas de transmisión.

En la tónica de sumisión de “Occupy Wall street” no se utiliza megafonía, está prohibida por la policía. Pero han inventado un curioso (y algo inútil) sistema de amplificación, el “eco humano”. Cada persona que suelta un discurso dice unas 5 palabras que son repetidas rítmicamente por el resto de sus oyentes. Dicen que Zizek estuvo por allí, como para enterarse de algo.

Una de las esquinas fue “tomada” por un grupo de «New Afrikans», «The Malcolm X Grassroots Movement», que se reivindican no como un grupo sino como una nación. Entre tambores y consignas fueron hablando bastantes personas, desde indigentes (organizados), hasta viejas glorias de las panteras negras. Discursos anticapitalistas, llamando a la unidad de todos los sectores populares marginados: negros, latinos, árabes y asiáticos; en contra del enemigo común, el capitalismo.

Insisten en que el muro que da nombre a “Wall st” fue construido por esclavos. Además de que las compañías que hoy dominan el mundo crearon su riqueza orginal del trabajo esclavo de los negros y en la actualidad “sacan sus ganancias del salario mínimo de nuestros hermanos”. Tras ese interesantísimo discurso de clase marchamos por la acera hacia el memorial por los esclavos africanos.

El acto central del día era la «manifestación» en Times Square. Miles de personas llegamos allí y de pronto nos vimos atrapados. Como ganado nos encerraron entre vallas, pero permitieron en todo momento que el tráfico siguiera. La gente se preguntaba asombrada qué sentido tenía eso. Y el sentido es claro, el poder. Como al niño que no se le deja subir en la silla con el único objetivo de ponerle límites, de que sepa quién manda, que no puede hacer todo lo que quiera. La demostración de poder era continua. Las motos entraban y salían en los cuadrados donde estaban «ellos». De pronto, un policía aparecía con un bebé en brazos ayudando a la madre a cruzarlo , salvándolo  de las garras de los perroflautas. Todos los símbolos de Time Square, inmutables. Luces y tiendas.  Un par de pijas se regodean y se hacen una foto con el texto «Todo va bien, sigan comprando». Pero la gracieta tiene su miga, es el mensaje del Sistema.

Una de las diferencias principales de Occupy con los movimientos europeos, o en concreto el 15M es la cuestión del poder. En España todo empezó con una cuestión de desligitimización de la democracia y de la necesidad de construir un nuevo poder. Sin embargo, las principales consignas en Occupy son contra la corrupción, contra que las corporaciones estén dentro de la casa blanca.

Las movilizaciones son de “protesta” en el sentido estricto. Lo que se plantea es que el gobierno haga algo, Obama les ha decepcionado. La imagen de la masa marchando por media acera o respetando las vallas es muy simbólica.

Hay un límite invisible que la masa no cruzará, el del poder. EEUU es un país increíblemente rico en luchas populares y obreras. El siglo XIX y la primera parte del XX están llenos de protestas, movimientos civiles, huelgas, insurrecciones y combates. Cientos de obreros y policías muertos en los combates. Es lo «bueno» de que aquí se puedan tener armas, que las clases populares pueden defenderse del Estado. Sólo hay que leer a Zinn o a Reed para darse cuenta que la «muchachada» del sábado no tiene nada que ver con los obreros que controlaban ciudades enteras durante semanas. Ladiferencia principal es que estos están pidiendo a papi que por favor no sea tan severo, aquellos sabían que el socialismo era la única alternativa. Es increíble leer la fuerza que tenía el partido comunista en los años ’30.

Sí es verdad que se oían voces del tipo «esta es su Democracia», pero no existe ni siquiera marginalmente una idea de que hay que construir otro poder.

La protesta en sí es emocionante, ha llevado la palabra capitalismo a cada hogar y centro de trabajo del país. Algo que no podíamos ni imaginar hace unpar de años. El peligro más inmediato para el movimiento es el apoyo que está recibiendo del ala izquierda de los demócratas, que algunos lo quieren usar como lanzadera interna. Algunos caucus del partido demócrata se han adherido al movimiento. Por otro lado los grandes sindicatos corporativistas y reaccionarios también han dado su apoyo (y sus consejos). Incluso el presidente ha dicho que las reivindicaciones del movimiento son razonables. Básicamente lo que se pretende es canalizar toda esa energía y reivindicaciones hacia el voto útil, porque la alternativa a Obama es el lobo, mientras que Obama es el lobo con piel de cordero.

Madera de calidad, oiga!

En mis andanzas por el mundo, cuando hablo de mi país, de lo que más presumo no es del jamón sino de nuestra policía. Cuento el chiste de los extraterrestres que llegan a la Tierra y se encuentran con un tricornio…

Y es que es verdad, nuestros «Fuerzas de seguridad del Estado» son muy profesionales. Recuerdo la huelga de los conductores de la Rober en Granada en el 2006. Decenas de policías locales se presentaron voluntarios para estar a las 5 de la mañana en las cocheras, listos para dar candela. Se les veía disfrutar. Enfundados en sus guantes de cuero nos hacían la técnica de la asfixia. Nos inmobilizaban apretándonos la nuez mientras ponían la rodilla en el pecho. Técnica bastante peligrosa. Y ahí llegaron nuestros salvadores (sic), los nacionales. Hombres curtidos en eso de las huelgas. Pusieron un poco de orden, despejaron y calmaron los ánimos de los pitufos (los locales). También me acuerdo de cuando ocupamos el consulado italiano en el 2001. Llegaron los nacionales pidiéndonos por favor que saliéramos. Al final nos dijeron que si no le hacíamos trabajar nos dejaban estar allí hasta que llegara la prensa. Así podría poner varios ejemplos más.

No, no se asusten, no estoy alabando a nuestra policía. Las Fuerzas de seguridad del Estado están para eso, para defender al Estado y más concretamente la propiedad privada de los medios de producción (véase bancos). Pero las actuaciones policiales se adaptan a cada situación, y en eso nuestra policía es buena. Mientras que creo que a la policía italiana se les fue de las manos Génova, creo que la actuación de la nuestra en Barcelona (2002) fue excelente. Nos persiguieron, utilizaron policías infiltrados, y nos dispersaron.

Por eso siempre observo con atención la actuación de la policía, porque en ocasiones es posible entrever lo que el poder tiene entre manos.

A diferencia del movimiento antiglobalización o contra Boloña, el 15M es más masivo, heterogéneo, y a la vez más ingenuo y desorganizado. Hay mucha diferencia entre las columnas romanas desfilando por Génova y el follón de la marcha contra el Papa que no tenía ni servicio de orden, ni siquiera un recorrido claro…

Las cargas de Barcelona fueron típicas. Muchos policías bien pertrechados contra la multitud. Con la obvia intención de disolver y generar la sensación de derrota entre la gente. Pero la intención real es infundir frustración, violencia y miedo. Eso, pensaban, disolvería el movimiento o lo haría minoritario. El verano le daría la estocada final.

Pero no ha sido así, y la visita del Papa, con todo el pijerío, lo carca y el descaro ha enfurecido aún más a la gente con dos dedos de frente.

Y bueno, a qué viene este artículo, no he dicho nada nuevo. Pues tengo la mosca detrás de la oreja por la actuación policial de estos últimos días. Ponemos los vídeos y comentamos:

[youtube http://youtu.be/9zJCgUu5mtE]

Lo interesante es el min 1.30. Una chica recibe un guantazo a mano abierta y después los dos se llevan unas hostias benditas más.  Pero fijaros los palos que se lleva el fotógrafo y su reacción de absoluto pavor. Está bajo shock. Aquí lo cuenta él. Ahí está el quid. Pero veamos alguno más.

http://politica.elpais.com/politica/2011/08/18/actualidad/1313687290_118915.html

En este vídeo de El país, se puede ver cómo el madero va a por una chica en concreto, la del vestido. Incluso se ve cómo la manosea. No le interesa en un principio su amiga o el chaval, sólo ella. Si paráis justo en el 37″, podéis ver la cara de terror de la amiga.

En esta crónica también podéis ver algún cachete, y en esta cómo retienen a la persona, le pellizcan los pezones y lo humillan. Hay más ejemplos de humillaciones y miedo, mucho miedo.

Bueno, aquí va mi hipótesis:

Desde las manifestaciones contra la guerra de Irak, no veo esta forma de brutalidad individualizada. Ya lo describí y puse el vídeo aquí. Pero aún así me ha llamado mucho la atención. Creo que las cargas masivas lo que generan es un sentimiento de grupo en la gente. El terror es más efectivo de manera individualizada, pero sobre todo indiscriminado. ¡Y es que en la mayoría de los casos están solos!. Cuanto menos causalidad haya, más desconcierto, más terror, más shock, genera en la persona agredida. Sólo hay que ver las caras y los comentarios. Esos pequeñísimos grupos de policías, apenas protegidos con cascos, serían impensables en manifestaciones como las de Génova o en otros países como Colombia. Vamos, esos policías no durarían un asalto. Pero en un movimiento tan inocente, tan desorganizado, que todavía busca que papá Estado los salve de los malvados bancos. Que, leyendo cientos de comentarios, todavía cree que en la posibilidad de un Estado de derecho donde la policía «está para protegernos». En este caso, este método de represión está siendo muy útil.

El movimiento no puede seguir huyendo del conflicto. Tiene que organizarse para enfrentarse a él, para protegerse. La violencia es parte de nuestra vida cotidiana en este sistema.

El pataleo de la chica cuando el amigo la levanta en brazos es la viva imagen del movimiento 15M.

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